Duelo Unadista, Miguel Antonio Ramón Martínez, ¡el Maestro!

El Maestro Miguel Antonio Ramón Martínez será velado en Cámara ardiente en la Sala de Consejos de la UNAD, desde el jueves 16 a las 5 de la tarde y durante toda la noche, hasta las 3 de la tarde del viernes 17 de Octubre. El Rector de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD, Jaime Alberto Leal Afanador, ha concertado con la familia del Maestro Miguel Ramón esta deferencia con la institución, para que los miembros de la familia Unadista puedan despedir con honores a uno de los fundadores más importantes y representativos de la UNAD, entrañable compañero de trabajo y maestro de muchos. "Esta ha sido su segunda familia y aquí tiene numerosos y entrañables hermanos y amigos que también aspiran a despedirlo como se merece", agregó el Rector.
Miguel Ramón comandó la Comisión de funcionarios que el Ministerio de Educación Nacional nombró en 1982 para que hiciera realidad el proyecto de la Universidad a Distancia prometido por el presidente Belisario Betancur. Desde entonces, la educación a través de la modalidad a distancia se convirtió para el Maestro Miguel Antonio Ramón en una de sus fervientes pasiones, pues consideraba que la educación era un referente obligado para personalizar y humanizar la sociedad, fuente de equidad y justicia social.
Varias actividades académicas y rituales religiosos se realizarán en torno a la velación en Cámara ardiente del Maestro Miguel Ramón en la sede de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD, situada en el barrio Restrepo, Calle 14 Sur No. 14-23, en la ciudad de Bogotá. El viernes 17 se trasladará el féretro a la funeraria La Candelaria, en la sede de la calle 98 con Carrera 19, también en la ciudad de Bogotá. Las exequias se llevarán a cabo el domingo 20 de octubre.
Los funcionarios y amigos del maestro Miguel Antonio Ramón Martínez tendrán la ocasión de honrar su memoria y de expresar a la familia sus sentimientos de pésame y solidaridad.
¡Paz en su tumba!

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Roberto J. Salazar Ramos

La Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD, rinde homenaje a la memoria del maestro MIGUEL ANTONIO RAMÓN MARTÍNEZ, fallecido en la mañana del jueves 16 de octubre de 2008. Fue insigne fundador de la entonces Unisur, siendo su primer Vicerrector Académico, asumiendo en adelante y en diversos momentos, responsabilidades diferentes en función de su desarrollo y consolidación, pero con unas mismas actitudes convergentes: pasión, convicción, compromiso y responsabilidad. Espíritu comunitario y solidario, pertinencia con el contexto local, regional y nacional, formación integral, fueron principios que Miguel Ramón esgrimió como pensamiento inspirador de las acciones misionales de la institución, y que hoy en día hacen parte de la vocación ontológica de la UNAD. La geografía de la universidad le debe a Miguel Ramón gran parte de su actual constitución. A pesar del dolor inmenso que causa esta inesperada partida del maestro, su familia puede decir con altivez, pero con profunda humildad, que tuvo un gran hijo y estandarte: supo encarnar el sentido original del maestro por vocación, para lo cual se preparó en la vieja estirpe de la Normal Superior de Pamplona, ciudad que tuvo el honor de verlo nacer; inspirado en las huestes del humanismo cristiano y en las metodologías de la pedagogía social de Paulo Freire, entendió que la alfabetización no era simplemente el acceso a las bases de la escritura, la lectura y las sumas, sino la interpretación personal y social de la propia vida, expresión que buscó materializar como líder de la Campaña de Alfabetización Simón Bolívar; aprendió como profesor universitario de comunicación por muchos años, que la comunicación es el principal factor de humanización y por eso pudo compartir con sus alumnos el testimonio de que la comunicación, más que simple relación o profesión, es una apuesta por la convivencia integral; como funcionario público, entendió que el trabajo es solidaridad y una apuesta política por el servicio al otro. Fue el maestro de maestros, como lo llamaba con cariño el actual Rector de la UNAD, Ing. Jaime Alberto Leal Afanador, quien se declaraba su alumno, al igual que sus compañeros directivos. Mantenía una permanente empatía con los estudiantes, con quienes compartía el principio de que la solidaridad y el liderazgo son valores necesarios para superar nuestra condición de mendicidad y pobreza. A Gloria Esperanza su esposa, a sus hijos Miguel y Andrés, al igual que a su familia y amigos, todos los integrantes de los diversos estamentos de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia, UNAD, les expresamos nuestra solidaridad y compañía. ¡Paz en su nueva morada! Roberto Salazar Ramos Vicerrector de Medios y Mediaciones Pedagógicas LA RED DE ESTUDIANTES CEAD GIRARDOT SE UNE AL DUELO NACIONAL